LOS GRADUADOS
Por Akiles Boy*
Juan José, como todos los días, muy temprano salía a su trabajo, esa tibia madrugada de agosto, recorría la misma ruta. Su caminar empezaba a ser más pausado, había rebasado los cincuenta años y pesaba la cruda por la borrachera de un día anterior. Pero en ese amanecer, una chispa de ilusión aceleró su corazón y le renovaría sus ganas de seguir en la lucha por su familia. En ese mes egresaría de la universidad el tercero de sus hijos, terminaba su carrera en la capital del Estado, después de cuatro años de esfuerzo, tenacidad y perseverancia. En su cabeza flotaba la romántica idea de un futuro mejor para su descendencia.
Sin saberlo, Juanjo, así le decían desde chico, perteneció a esa generación de mexicanos que representaban fielmente, a la nombrada después “La Cultura del Esfuerzo”, esos que se echaron a los hombros, la nada fácil empresa de impulsar y sostener a los hijos para prepararse, y no repetir su historia de solo aspirar a un trabajo con salario mínimo y sin reconocimiento social. En esos tiempos, en los que no cabía la menor duda, era la mejor apuesta y valía la pena asumir los costos y riesgos.
Sus ojos se iluminaron al imaginar a otro de sus hijos convertido en un profesionista. Sentía el orgullo y satisfacción que recorrían su cuerpo y le daban el suficiente ánimo y la energía para continuar en su rutinaria actividad. Muchos símbolos se perciben en un acontecimiento de graduación, significa llegar a una meta y también la esperanza de nuevos horizontes. Transitar de los ideales a la realidad que golpea duro y obliga a poner los pies sobre la tierra. Para lo que sigue, es necesario el salvavidas y un plan de supervivencia, porque afuera de las aulas esperan los campos de batalla.
En los años en que se ubica esta historia, a fines de la década de los sesentas, se estrenó en México “El Graduado” (The Graduate), película estadounidense (1967), dirigida por Mike Nichols y estelarizada por Dustin Hoffman, Anne Brancroft y Katharine Ross. La premiada cinta fue una adaptación de la novela del mismo título, escrita por Charles Webb y marcó el debut cinematográfico de Hoffman, el polifacético actor norteamericano.
Encuadrada dentro del género del drama y comedia, el argumento presenta las peripecias de Benjamín Braddock, recién egresado de la universidad que regresa a su casa durante las vacaciones, se ve implicado en una relación con Mrs. Robinson, quien planea y logra seducirlo, y después reconoce haberse enamorado de su hija Elaine, En el desenlace, ante la revelación del affaire oculto, Benjamín decide enfrentar la situación, impide el casamiento de su amada y escapan juntos.
La ficción escrita por Webb está muy lejos del drama que viven muchos egresados de nuestras universidades en México, en los últimos años agudizado por el precario nivel que brindan la mayoría de las escuelas de educación superior y la falta de oportunidades laborales. El status de subempleado es común por las bajas remuneraciones y la ausencia de puestos de trabajo adecuados al perfil de los nuevos graduados. Una realidad lacerante que alimenta el desaliento social y resta valor a una educación todavía en proceso de liberarse de lastres crónicos, como el sindicalismo atávico y pernicioso; los inciertos y cambiantes métodos y contenidos que no cumplen con las expectativas; la insuficiente infraestructura; y agregue, entre otros, al imbatible analfabetismo.
Para cerrar esta entrega, les anoto, que la película “El Graduado” fue tan exitosa como su tema musical “Mrs Robinson” (“Señora Robinson”) de la autoría de Paul Simón e interpretada originalmente por Simón y Garfunkel. La canción, incluida en el álbum Bookends , fue lanzada en 1968 y alcanzó el primer sitio del Billboard en Estados Unidos, además del Grammy en 1969. Al final del filme, cuando Elaine y Benjamín van en el autobús, sonríen y de fondo se escucha la melodía “The Sounds of Silence” (Los Sonidos del Silencio) otro hit del mismo grupo musical norteamericano. Hasta la próxima.
14 de agosto de 2022
*Miembro de la Red Veracruzana de Comunicadores Independientes, A.C.