Se distinguió a la legisladora mexicana con este galardón por su labor al establecer cuotas de jóvenes en la Ciudad de México |
Ciudad de México. La diputada federal del PRI Cynthia López Castro recibió, este fin de semana, el premio Cremer-Passy como Parlamentaria del Año, en el marco de la 145 Asamblea de la Unión Interparlamentaria (UIP), que la distingue como la primera mujer en el mundo en obtenerlo.
El reconocimiento internacional es por su labor al establecer cuotas de jóvenes en la Ciudad de México, cuando fue diputada constituyente y con el compromiso de impulsarlas cuotas a nivel mundial garantizando que este sector tenga mayor espacio, ya que solo el 2.8 por ciento de los parlamentarios pertenecen a este sector, cuando son la mayor población.
En el evento realizado en Ruanda, país con mayor paridad de género en el mundo, donde México se ubica en cuarto lugar, también se honró a un legislador ucraniano por su trabajo en la búsqueda de la libertad de su país. La Unión Interparlamentaria fue fundada por William Randal Cremer en 1889 y es la organización más grande del mundo de parlamentarios.
Tras recibir el galardón, en la ceremonia que se realizó en la ciudad de Kigali, capital de Ruanda, López Castro recordó que de joven le prometió a su mamá que sería congresista y le serviría a su país. A partir de ese momento, dijo, supe exactamente lo que quería hacer en la vida, encontré mi vocación y mi pasión que hasta la fecha me mantiene activa.
“He sido congresista en cuatro ocasiones diferentes, a nivel local y dos veces a nivel federal. Este ha sido un logro extraordinario para alguien que viene sin antecedentes familiares en la política y ha sido el resultado de mucho trabajo y constancia”, subrayó la legisladora mexicana.
Enfatizó que aboga por la cuota de jóvenes en los cargos de elección y reconoció que es difícil ser política siendo una mujer joven porque a veces, anotó, nuestra voz no se escucha tan fuerte y clara como nos gustaría. Por ello, destacó que se siente honrada de recibir este premio como un reconocimiento a esa lucha de su generación y, particularmente, por saber que están nivelando el campo para los que vienen detrás.