La presidenta de la Comisión de Juventud señaló que es necesario garantizar el desarrollo de la libre personalidad. Pide que vestimenta, corte, color o el largo del cabello, no sean una excusa para negarles la educación pública. |
Ciudad de México. La diputada federal Karla Ayala Villalobos busca que los estudiantes tengan la libertad y la independencia de elegir y expresarse a través de su manera de vestir en sus centros educativos.
A través de una iniciativa, la integrante del Grupo Parlamentario del PRI pretende que los educandos gocen de plena independencia para escoger su profesión, pasatiempos, apariencias físicas, estudios o actividad laboral.
La legisladora explicó que, con el confinamiento derivado de la pandemia, muchos estudiantes tuvieron la oportunidad de experimentar libremente su personalidad, cambiando de corte, color o el largo del cabello.
Señaló que, tras el regreso a clases presenciales, los jóvenes decidieron adoptar estilos con los cuales se sienten más cómodos, identificados y seguros de sí mismos, por lo que, dijo, es necesario que les sea respetado y que no sea una excusa por la cual negarles la educación pública.
En la propuesta, la legisladora priista recordó que para el regreso a clases del ciclo 2022-2023 la Comisión Nacional para Prevenir la Discriminación anunció que las y los estudiantes de los niveles básicos, medio y medio superior podrán asistir a clases con el “look” con el que más se sientan identificados.
“Con esto rompemos el esquema que siempre ha existido en nuestras escuelas, donde las y los estudiantes debían seguir códigos de vestimentas, tipo de peinado o color de cabello, esto debe prevalecer la elección de ellas y ellos, de acuerdo a su personalidad y gustos”, expuso.
Por ello reiteró que, es necesario tener leyes claras, para tener plasmados en artículos, los conceptos y las legislaciones pertinentes para garantizar el desarrollo de la libre personalidad.
Destacó que el Grupo Parlamentario del PRI está a favor de la niñez y la juventud, de que estas forjen una personalidad adecuada para un desarrollo libre y progresista, de acuerdo a la evolución de nuestra sociedad.
“Es necesario dejar claro que la forma en la que vestimos, cortamos o pintamos nuestro cabello, o en sí, la forma en la que decidimos sobre nuestro cuerpo, no es un impedimento o antónimo de una buena educación”, refrendó en su iniciativa que busca anexar un artículo a la Ley General de Educación, en materia del libre desarrollo de la personalidad.