* En la Cumbre Uniendo Mentes con que COPARMEX CDMX celebró su 25 aniversario, María Marván, Lorenzo Córdova y Uuc-kib Espadas opinaron sobre el proceso en marcha y la fortaleza del INE ante un poco probable fraude |
Ciudad de México. El proceso adelantado de la elección federal para elegir a quien ocupe la Presidencia de la República a partir de 2024, no sólo viola la Constitución, sino que abre la puerta para que el perdedor impugne porque en México aún estamos lejos de la responsabilidad política de los actores para aceptar la derrota, pese a que el riesgo de un conflicto postelectoral no depende de la integridad de la elección, ya que el Instituto Nacional Electoral (INE) es un órgano que garantiza la ausencia de sobre tiro, falsificación de boletas, carruseles y otras actividades que se realizaban años atrás.
María Marván, Lorenzo Córdova y Uuc-kib Espadas participaron en el panel Democracia y Modernidad en Riesgo de la Cumbre Uniendo Mentes, organizada por la COPARMEX CDMX con motivo de su 25 aniversario, en coordinación con El Financiero, donde los expertos en temas electorales expresaron su visión del rumbo que tiene el actual proceso electoral federal adelantado, que visiblemente viola las leyes.
La ex presidenta consejera del IFE y ex presidenta comisionada del IFAI, puso en duda que estemos viviendo en una democracia cuando existe una cada vez más creciente polarización donde su busca excluir a quienes piensan diferente y esta “puede impactar negativamente el proceso electoral del 2024” por lo que llamó a todos, actores políticos, medios de información y ciudadanos, a realizar un análisis y hacernos responsables de “qué tanto estamos favoreciendo a esa polarización”.
“No se puede hablar de una democracia cuando hablamos de un nosotros los buenos, los otros, los malos; la democracia es inclusión, es reconocimiento de la diferencia, hacer convivir las diferentes perspectivas del país”, por lo que ve con agrado la “movilización de la sociedad civil organizada en múltiples eh espacios, múltiples organizaciones, sin representar a nadie” salvo el deseo de fortalecer la democracia.
Y sobre el proceso adelantado, destacó cómo tantas violaciones a la Constitución “abre la puerta para que la elección del 2024, el perdedor la impugne” o como destacó Lorenzo Córdoba, hace ya muchos años no hay fraudes y los conflictos postelectorales están erradicados porque los propios mecanismos del INE lo hacen inviable, pero si hay “es mucha litigiosidad”.
Porque “la responsabilidad política de los actores, que es igual a cero. Porque en México, en efecto, todavía estamos muy lejos de que se haya asimilado y asentado una cultura de aceptabilidad de la derrota”, expresó el ex consejero presidente del INE que dejó su cargo hace algunos meses.
Eso lo estamos viendo antes de la elección como tal, sobre todo, cuando ha iniciado las campañas antes del plazo estipulado por la ley. “Y que todos violen la ley, no empareja el terreno. Por eso es muy importante ver qué van a hacer en este contexto las autoridades electorales”, destacó.
Y esto abona a que al finalizar la jornada electoral, el perdedor cante fraude, por lo que, dijo, es necesario construir, “desde la autoridad electoral, desde la opinión pública y desde la ciudadanía, “una contra narrativa del fraude. Porque en México irregularidades puede haber, pero fraudes no hay desde hace un buen rato”.
El actual consejero electoral, Uuc-kib Espadas destacó en la #CumbreUniendoMentes que el riesgo de un conflicto electoral no depende de la integridad de la elección, en los últimos 70 años hemos tenido solo dos conflictos en torno a la elección presidencial en 1988 y 2006, pero en este sistema electoral “es imposible un fraude”.
Y anotó: “Hoy no puede haber sobre tiros de boletas para que, si el resultado no es el que al partido de Estado le guste, el paquete electoral se vaya a una casa de seguridad, se cambia, se arregla; también es imposible falsificar boletas; mucho menos el carrusel con brigadas de votantes oficialistas con 20 credenciales de elector que van votando de casilla en casilla. Esto es absolutamente imposible. Y ojo, ni siquiera si los 11 consejeros del Consejo General quisieran hacerlo, podrían de ninguna forma llevar a cabo un fraude de esa naturaleza”.