“Si en algo ha habido constancia en este gobierno durante los dos años que lleva en el poder es la contradicción que en él persiste”, acusó la Diputada Claudia Reyes Montiel, del Grupo Parlamentario del PRD.
Ciudad de México. En campaña, recordó la legisladora, “declaró que se regresaría al Ejército a los cuarteles, pero ahora vemos como cada vez más se militariza el gobierno al atribuirle diversas funciones, incluido el control real de la Guardia Nacional y la seguridad pública.”
“Se dijo también que nadie estaría por encima de la ley, pero en estos dos años hemos visto como diversos personajes cercanos al gobierno, uno de ellos el propio hermano del Presidente, han violado la ley y obtenido beneficios económicos bajo el amparo del poder y no ocurre nada, al contrario, se les solapa y se pide se castiguen a quienes dan a conocer sus acciones”, denunció. Así, indicó, “podemos seguir señalando otras tantas contradicciones como el caso de los fideicomisos.”
“Sobre estos se dijo que eran un medio para dilapidar dinero, robar recursos públicos o para beneficio de aviadores, declaración que de paso demuestra el desconocimiento de esta figura y cómo operan. Pero a pesar del rechazo que existe por parte del Presidente a los fideicomisos, tanto él como su gobierno y partido los han usado para su beneficio”, opinó. “Recordemos el caso del fideicomiso Por los Demás que supuestamente se creó para apoyar a los damnificados del sismo de septiembre de 2017.”
“Esta acción además de ilegal, pues la ley prohíbe estrictamente la entrega directa de recursos partidistas a las personas, se demostró por parte del INE que este fideicomiso se usó para mover y retirar recursos de manera opaca, todo lo cual le valió al partido una sanción por 197 millones de pesos.”
Otro ejemplo que planteó Reyes Montiel, “es el fideicomiso que se usa actualmente para mover recursos del Programa Sembrando Vida. Si tomamos en cuenta los dichos del Presidente en contra de los fideicomisos, acerca de que se prestan para la opacidad, manejo discrecional de recursos y la corrupción, podríamos afirmar que estos también se aplican para estos casos, pero aquí nadie dice nada.” Otra contradicción que observamos con los fideicomisos, concluyó, “es que no fue hasta que desaparición que se revisa funcionamiento, es decir, antes no se tuvieron elementos que justificarán su desaparición o bien su continuación, pero para ello tenían que modificarse. Esta falta de bases, y la nula atención a quienes le brindaban esta información, es lo que hizo ver la decisión de su desaparición como un mero capricho presidencial que su grupo parlamentario acató sin chistar.”
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