Alvarado: Violencia y complicidad
Salvador Muñoz
Una cosa son las alharacas propias de la calentura electoral que aún se vive por parte de quienes defienden sus triunfos como de quienes se resisten a la derrota, y otra muy distinta, es el uso de la violencia para hacer una “democracia a modo”.
En redes sociales circuló un video con respecto a la elección de Alvarado que el viernes, el OPLE local había cedido el triunfo a Lizzette Alvarez, de la alianza Juntos Haremos Historia.
Dicho video evidencia a un grupo de choque, encapuchados, que llegaron a dos casillas (284 Básica y 284 Contigua) de la localidad de Buena Vista. Los funcionarios electorales salieron huyendo dejando todo en el sitio donde se impuso la violencia.
Por espacio de una hora, la documentación estuvo a merced de ese grupo de choque donde pudieron hacer y deshacer lo que se les antojó con el material electoral.
Al cómputo de las casillas, curiosamente, éstas dos le dan el triunfo a Lizzette Alvarez.
Si ya de por sí es irregular por cualquier lado la irrupción de este grupo de choque en la Sección 0284, más irregular se vuelve la actuación de las autoridades del OPLE que tras el hecho violento, decidieron cerrar las casillas y olvidar el asunto. Sí, porque no hubo siquiera, la intención de levantar un acta que narrara los hechos que fueron evidenciados en videos.
A ello se le suma el papel del presidente del Organismo Público Local Electoral en Alvarado, Pedro José Ramón Delfín, quien mostró un inusitado interés por la apertura de estas casillas. ¡Vamos! ¡Sospechosismo puro!
Todavía más:
El área jurídica del candidato de la alianza PAN, PRI y PRD acudió a las oficinas del OPLE local, para solicitar las actas de los escrutinios de los cómputos finales y de los paquetes que se volvieron a recontar y nomás de barbas, les dijeron que nones, que nanai, que cuernos, ¡se los negaron! aunque eso sí, muy amablemente le dijeron que sin falta, se los darían el lunes.
En pocas palabras, una tomada de pelo, una burla o una simulada ignorancia porque como autoridades electorales saben y tienen en claro que este lunes es el vencimiento para la fecha de impugnación…
Alvarado es una muestra de lo mucho que se cuenta, de lo que se dice en torno a esta elección que se está empañando aún más conforme pasan los días: tenemos candidatos muertos, amenazados para bajarse de la contienda, amedrentamiento durante la jornada electoral por grupos de choque, combinado con la complicidad de quienes se supone que deberían garantizar la legalidad y sobre todo, el respeto a la voluntad popular.
Y así como se señala lo negativo, hay que destacar el papel de los ciudadanos, los que quisieron hacer valer el voto ciudadano así como los que acudieron a las urnas, pero que lamentablemente fueron amedrentados por la violencia.
Hay quienes consideran prudente, lógico, legal, que esas casillas, que estuvieron a merced de un grupo de choque, deben ser invalidadas, más cuando “gracias” a ellas, le dan “el triunfo” a Lizzette Alvarez.
Los triunfos a punta de garrote por ningún lado tienen cara de democracia… si esto es en elecciones, ¿qué será en Gobierno? ¡Ah! ¡Ya sabemos!