• El CESOP presenta los trabajos ganadores de la décima primera edición en recopilación impresa
Ciudad de México. El Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública presenta en una recopilación impresa los trabajos ganadores de la décima primera edición del Premio Nacional de Investigación Social y de Opinión Pública 2021.
Comorbilidades en pacientes de Covid-19 en México
El primer lugar fue para Augusto Ricardi Morgavi, con la investigación “Determinantes sociales de la desigualdad en la influencia de las comorbilidades sobre los estadios de severidad en pacientes de Covid-19 en México”.
El autor destaca la veloz propagación del virus SARS-COV- 2 en México que amplió el riesgo de progresión a estadios de mayor severidad del coronavirus en pacientes con comorbilidades. Este riesgo, dice, es capaz de potenciarse, neutralizare o encontrarse interferido por los determinantes sociales de la salud asociados a la privación y rezago social, en un país caracterizado por altas tasas de incidencia de enfermedades cardiometabólicas y patrones persistentes de reproducción de desigualdad social.
Este estudio tiene como objetivo identificar el efecto fuerza de las comorbilidades sobre los estadios de severidad del Covid-19, para evaluar lo que significó de manera estadística, controlando los efectos de los determinantes sociales de la salud asociados a la desigualdad. El modelo de análisis propuesto controla y evalúa el papel que desempeñan las características sociodemográficas de la población en los pacientes confirmados de Covid-19.
A partir de un diseño observacional, retrospectivo y transversal se aplica la técnica de regresión logística múltiple multinomial (RLMM) empleando una base datos depurada de 501,729 casos confirmados de Covid-19, alimentada y retroalimentada por la Secretaría de Salud del gobierno federal de México. A este base madre se fusiona el Índice de Rezago Social Municipal 2020, elaborado por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política Social (Coneval).
Los resultados indican que la significancia estadística y fuerza predictora de las comorbilidades cardiometabólicas se mantiene casi invariante a través de los diferentes estadios de severidad, tanto cuando se ajusta como cuando no por los determinantes sociales.
Implementación de paridad
El segundo lugar del Premio Nacional de Investigación Social y de Opinión Pública 2021 fue para el trabajo “La implementación del principio de paridad y la reproducción de la violencia política como respuesta patriarcal”. Estudio de caso aplicado al sistema de partidos políticos en los municipios de Oaxaca, investigación de Marisol Vázquez Piñón.
Esta investigación examina la implementación de la política de igualdad paritaria en las elecciones municipales del sistema de partidos en Oaxaca y la violencia política contra las mujeres debido al género como un efecto no deseado. La violencia política contra las mujeres puede iniciar desde el proceso de selección de candidaturas, donde operan mecanismos que responden a un interés previo de utilizar a las mujeres para cumplir con la paridad, pero con la intención de moverlas del cargo una vez que resulten electas (efecto de pieza de ajedrez).
Explica la autora de esta investigación que, a pesar de la paridad, los mandatos de género dentro de los partidos políticos actúan como reglas informales y terminan por imponer su propia lógica, es decir, los hombres líderes partidistas conservan el monopolio de las candidaturas y cargos que ejercerán las mujeres. Para corroborar la hipótesis de que la violencia política en razón de género es un efecto no deseado de la política de paridad, se llevó a cabo un estudio cualitativo mediante entrevistas semiestructuradas a cinco mujeres que enfrentaron esta modalidad de violencia, quienes iniciaron juicios ante los tribunales electorales locales y federal, en los que se acreditaron dichas conductas.
La referida investigación ganadora del segundo lugar utilizó, según la autora, técnicas de análisis documental con la recopilación de algunas sentencias de los tribunales electorales; se examinaron las leyes y reformas locales y federal en materia de paridad, así como de violencia política en razón de género.
La autora señala que con la reforma de paridad se obligó a los partidos políticos a postular mujeres al 50 por ciento de las candidaturas de representación (en 2014) y posteriormente a conformar los órganos colegiados de manera paritaria (en 2019). Este principio está consagrado en el ámbito federal en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y en la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales.
Inclusión financiera
El trabajo premiado con el tercer lugar fue “El impacto de la inclusión financiera en indicadores de desarrollo social en México: un enfoque de género”, de Guadalupe Carmen Briano Turrent. Señala que la inclusión financiera se ha convertido en un factor estratégico para reducir la pobreza, la desigualdad en los ingresos y alcanzar el crecimiento económico sostenible.
La inclusión financiera constituye un pilar fundamental para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) establecidos en la agenda de las Naciones Unidas, y desempeña un rol fundamental en la reducción de las brechas de desigualdad en salud, pobreza y desempleo, destaca.
Menciona que de acuerdo con cifras del Global Findex (2020:1), el 57.4 por ciento de los hombres tiene una cuenta bancaria, en comparación con el 51.4 por ciento de las mujeres, lo que se traduce en que 304 millones de mujeres en América Latina no poseen una cuenta.
A pesar de que México es una de las 15 economías más grandes del mundo y registra un desarrollo humano medio-alto, el país tiene un rezago considerable en materia de inclusión financiera, ya que más de la mitad de su población no tiene acceso a servicios financieros, colocándolo en la cuarta posición más baja en América Latina, sólo por encima de países como Haití, Nicaragua y el Salvador. Respecto a la brecha de género en México, 65 por ciento de las mujeres cuentan por lo menos con un producto financiero, pero aún está por debajo del registro que alcanzan los hombres (72 por ciento), además de que la mayor brecha se registra en las poblaciones rurales.
El objetivo de este trabajo es estudiar el impacto de la inclusión financiera en sus dimensiones de infraestructura (acceso), tenencia y uso de los servicios financieros sobre indicadores de desarrollo humano (salud, educación e ingresos) de las mujeres en las entidades federativas de México. La muestra de estudio se conformó de 448 observaciones durante el periodo de 2007-2020, es decir, 14 unidades de análisis por estado.
Este trabajo plantea la siguiente hipótesis general de investigación: “a mayor inclusión financiera en sus dimensiones de acceso, tenencia y uso, mayor nivel de desarrollo humano (salud, educación e ingresos)”.
Dos menciones honoríficas
En el Premio Nacional de Investigación Social 2021, las y los jurados otorgaron dos menciones honoríficas. La primera para la investigación “Transferencistas: una clase social para entender lo rural a partir de la estructura del ingreso de las comunidades rurales de la zona maya de Quintana Roo, México”, de Oscar Iván Reyes Maya.
El autor propone el término transferencistas como una clase social basada en la estructura económica de los hogares rurales de la zona maya de Quintana Roo, al tomar en cuenta que los diferentes cambios económicos y sociales que han experimentado transformó sus ingresos, los cuales no están mayoritariamente compuestos por la venta de productos agrícolas, han dejado de ser campesinos, desde el punto de vista teórico debido a que la producción de autoabasto ya no es el principal sustento.
Sin embargo, tampoco son jornaleros agrícolas o lo que se llamaría proletarios del campesinado, ya que los salarios no son la principal fuente de ingresos del hogar, sino que los hogares rurales dependen económicamente cada vez más de las transferencias públicas y privadas que hacen otros hogares, pero sobre todo de las transferencias gubernamentales. Por consiguiente, el campesinado de la zona de estudio se enfrenta al desmantelamiento de sus capacidades como unidad de producción, reduciendo su vínculo con la agricultura y la pertenencia a un grupo indígena.
La segunda mención honorífica correspondió al trabajo “Ampliación de derechos en torno al aborto y el matrimonio: patrones causales y recomendaciones para la intervención”, de Carlos Arturo Martínez Carmona. Esta investigación da cuenta de las condiciones necesarias y suficientes para concretar las modificaciones legales en materia de despenalización del aborto y matrimonio igualitario en México. Mediante el análisis cualitativo comparado de 24 decisiones legislativas subnacionales entre 2007 y 2017 el estudio explora las condiciones causales relativas al cambio en las políticas morales para la ampliación de derechos.
Con base en los hallazgos de investigación se realizan 10 recomendaciones informadas teórica y empíricamente para ampliar los derechos de las mujeres y poblaciones LGBT.
En esta edición del Premio Nacional de Investigación Social y de Opinión Pública, el jurado se conformó por las doctoras Elitania Leyva Rayón, profesora investigadora de tiempo completo en el Departamento de Economía, de la Universidad de las Américas, Puebla; y Aleida Azamar Alonso, profesora investigadora titular C de tiempo completo del Departamento de Producción Económica, Universidad Autónoma Metropolitana de Xochimilco; y por los doctores Alejandro Dávila Flores, maestro-investigador del Centro de Investigaciones Socioeconómicas de la Universidad Autónoma de Coahuila; Gerardo Maldonado Hernández, profesor-investigador en la División de Estudios Internacionales del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) y Gustavo Meixueiro Nájera, presidente de WAPOR-Latinoamérica (World Association for Public Opinion Research.