• Expertos exponen la importancia de contar con bases legales que protejan las zonas de manglares y humedales
• Destacan la relevancia de este tipo de carbono en el amortiguamiento de los impactos del cambio climático
Ciudad de México. La Comisión de Cambio Climático y Sostenibilidad, en coordinación con International Conservation Caucus Foundation y The Ocean Foundation realizaron en la Cámara de Diputados la mesa de análisis “Preceptos fundamentales para construir un marco legislativo en materia de carbono azul en México”.
La diputada Edna Gisel Díaz Acevedo (PRD), presidenta de la Comisión, indicó que es el momento propicio de iniciar labores que urgen más que nunca en el contexto de la integración del Presupuesto de Egresos de la Federación 2024. “Aquí están las y los especialistas para explorar la posibilidad del fortalecimiento real de la estrategia nacional mediante reglas claras y definidas para proteger estas zonas naturales”, dijo.
“Sean bienvenidos a este foro donde veremos los aspectos fundamentales para construir un marco legislativo en materia de carbono azul en nuestro país”, precisó.
A su vez, el diputado Jaime Martínez López, presidente de la Comisión de Marina, alertó que alrededor de 200 municipios ubicados en la costa son los que principalmente contaminan estas zonas, por lo que se requiere de plantas tratadoras para evitar que los residuos lleguen al mar. “Hay áreas críticas por desagües y basura, se requiere de presupuesto. Si no se invierte no habrá hechos concretos, independientemente de las mejoras jurídicas”.
Subrayó que el cambio climático y el aumento de calor que padecen diversas zonas en el mundo tiene que ver en gran medida con la temperatura de nuestros mares.
La diputada Mirza Flores Gómez (MC) dijo que, a pesar de que su grupo parlamentario ha impulsado iniciativas en materia de mares, éstas no han prosperado, pues no son votadas a favor o se archivan. Destacó que México es el 4º país en cobertura de manglares distribuidos en 17 entidades.
Consideró que se deben impulsar leyes, normas y regulaciones en materia de carbono azul, que incluyan la contabilidad de emisiones por degradación costera y promuevan mecanismos de comercio regulado de bonos de carbono, así como la educación y concientización sobre la importancia de ecosistemas marinos y costeros que capturan y almacenan el carbono azul.
El capitán de navío, Francisco Javier Guerrero Márquez, coordinador interinstitucional de Investigación Oceanográfica de la Secretaría de Marina, dijo que se requiere hacer sinergia entre las partes involucradas para encontrar soluciones que ayuden a frenar y revertir esta crisis climática que afecta a la población. “Este espacio es propicio para sentar una base que contribuya de forma efectiva desde las trincheras de cada uno”.
Gloria Cuevas Guillaumin, directora de Análisis Ambiental de la Semarnat, destacó que México es el 4º país en extensión de manglares en el mundo y tiene un alto potencial de almacenamiento de carbono azul mediante la conservación de ecosistemas y propiciar una mayor captura mediante estrategias de restauración, pero para ello se necesita un marco legislativo que integre el concepto de carbono azul que dé una base legal sólida.
Jaime Cavelier, vicepresidente de Alianzas Estratégicas The ICCF Group, explicó que el carbono azul es aquel que se almacena en los sistemas marinos y costeros, pero para su aprovechamiento se requiere de insumos técnicos y científicos, así como consolidar un marco legal. “El dinero y la legislación en medio ambiente no son un gasto, son una inversión”.
Alejandra Navarrete, oficial de Asuntos Multilaterales y de Gobierno de The Ocean Foundation, dijo que es importante pensar en el carbono azul como un ecosistema complejo dentro del concepto de humedales, además de que la cobertura vegetal de estas zonas disipa las olas, controla la erosión y amortigua los impactos del nivel del mar, por lo que conservar el carbono azul de estos sitios es vital en la adaptación al cambio climático.
Aspectos técnicos y científicos para legislar sobre carbono azul
Durante la primera ronda de participaciones “Aspectos técnicos y científicos para legislar sobre carbono azul”, activistas, expertos y académicos resaltaron la importancia del carbono azul en la mitigación de los efectos del cambio climático, así como la relevancia de que pueda contar con bases jurídicas para realizar acciones efectivas.
Marisol Plascencia, directora del Centro de Biodiversidad Marina y la Conservación A.C., aseguró que ese momento que se veía lejano y urgente de atender ya nos alcanzó, por lo que ahora se requiere enfocar transversalidad en las acciones que todos deben tomar.
Por su parte, la presidenta de Resiliencia Azul, Rosalía Andrade, apuntó que el Sistema de Monitoreo Forestal de la Comisión Nacional Forestal y el Sistema Nacional de Monitoreo de Manglares son plataformas que pueden usarse para un monitoreo de este rubro.
Al hablar de los humedales costeros de agua dulce, Patricia Moreno, investigadora emérita de INECOL, resaltó el papel que juegan estos espacios en nuestro que pueden albergar millones de toneladas de carbono.
Mientras tanto, Octavio Aburto, director del Instituto de Oceanografía Scripps, enfatizó que es más barato conservar que restaurar. Advirtió que el cambio de uso de suelo es la principal causa de pérdida de los humedales en México.
Experiencias de proyectos implementados hacia un mercado de carbono azul
En la segunda ronda: “Experiencias de proyectos implementados sobre carbono azul y hacia un mercado de carbono azul en México”, se señaló la falta acciones, así como vacíos legales que evitan avances en la materia.
Tannia Frausto Illescas, directora de Cambio Climático en Wildcoast/costasalvaje, advirtió que actualmente el mercado regulado no está operando en México ni existe un protocolo, por lo que para hacer proyectos de certificación se debe optar por el mercado voluntario.
José Inés Gloria Palma, asesor técnico del Único Ejido San Crisanto, apuntó que las personas rellenan los manglares para convertirlos en zonas habitacionales y sin contar con los permisos correspondientes.
Norma Arce Peña, gerente de Océanos de Conservación Internacional México, consideró que estos pueden ser una oportunidad de financiamiento a largo plazo para la conservación de ecosistemas; sin embargo, debe hacerse de manera adecuada porque hay falta de regulación y de derechos humanos de los involucrados.
Andrea Lara Guevara, oficial de Incidencia en Política Ambiental de WWF México, afirmó que la conservación no debe centrarse en el marco legislativo o en cómo regular un mercado de carbono azul, pues antes se requiere dar el peso suficiente a manglares y humedales.
Valeria López Portillo, gerente de Clima y Ecosistemas de WRI, aseguró que conservación sin financiamiento es sólo conservación, por lo que destacó la ventaja de los bonos de carbón para este fin.
Ximena Celis Barquera, coordinadora de Cambio Climático en Política y Legislación Ambiental (POLEA), señaló que ante la falta de un marco jurídico de bonos de carbono azul se ha presentado un tema de prácticas abusivas por arte de desarrolladores de proyectos, en contra de comunidades.
Preceptos fundamentales a considerar en un marco legislativo de carbono azul
En la última ronda, “Preceptos fundamentales a considerar en un marco legislativo de carbono azul”, especialistas en derecho ambiental alertaron la falta de mercado y definiciones claras en la ley.
Franco Lammoglia, especialista en Derecho Ambiental, dijo que la conservación no debe verse como un gasto; no obstante, aclaró, al mercado lo crea la demanda y en México no existe ninguna obligación para consumir mercado de carbono.
De manera virtual, Juan Carlos Carrillo, coordinador de programa en el Centro Mexicano de Derecho Ambiental, aseveró que el marco legislativo debe establecer definiciones claras de conceptos con base científica y hacer operativos los instrumentos establecidos en la ley.
Gabriela Gómez, directora de Relaciones Públicas e Institucionales de Beta Diversidad, apuntó que hay un área de oportunidad para legislar que privados puedan aprovechar estos bienes a través de bonos de carbono, aclarar el tratamiento fiscal y que haya un padrón de desarrolladores y compradores que actualmente participan.
Luis Fueyo MacDonald, asesor en el Centro Intercultural de Estudios de Desiertos y Océanos, A.C., puntualizó que se debe fortalecer el marco legislativo y cuidar el proceso de armonización legislativa, así como incorporar el enfoque de derechos.
Yolanda Alaniz Pasini, especialista en Derecho Parlamentario, dijo que “se ha legislado a espaldas del mar” ya que, a pesar de que se depende de este, no se le da la importancia y esta es una oportunidad.
María Elena Mesta, experta del proyecto Kuxatur, expresó que antes de buscar soluciones en la naturaleza se requiere un marco legal.
José Antonio Benjamín Ordóñez Díaz, autor del Libro Rojo, documento entregado en la Conferencia de las Partes número 5, calificó como preocupante que en cada administración se inicia, pero nunca se continúa la atención a estos problemas, por lo que nuestro país esta relegado y cada que se escribe algo se queda sólo en el papel. Advirtió que hay contratos leoninos de empresas que vendan los bonos de carbono.