Ciudad de México. Ante el previsible contagio a 250 mil personas por Covid 19 en próximos días, de las cuales más de 10 mil 500 requerirán terapia intensiva, la diputada Abril Alcalá exhortó a la Secretaría de Salud poner a disposición de los gobiernos de las 32 entidades federativas la mayor cantidad posible de camas hospitalarias, en colaboración con todas las instituciones de salud públicas.
Al mismo tiempo solicitó a los gobernantes de esas entidades otorgar las facilidades necesarias a la Secretaría de Salud para tal propósito.
Lo anterior -dijo- es con el objetivo de mitigar los efectos de la pandemia del COVID-19, que podrían ser aún más catastróficos si no se previenen.
Llamó a considerar la experiencia de países, incluso potencias mundiales, donde el coronavirus causante de esta enfermedad colapsó sus sistemas de salud, y prever que la ya intensa competencia mundial por insumos cada vez más escasos se podría traducir en mayor pérdida de vidas humanas, incertidumbre económica y deterioro emocional.
De acuerdo con esa experiencia -argumentó-, uno de los principales problemas en esos países fue la falta de camas hospitalarias para pacientes que lo requerían, incluso sin importar el padecimiento, lo que llevó a improvisar clínicas, usar hoteles y “tomar” hospitales privados, como se vio en Alemania, España, Italia y Reino Unido.
Habida cuenta de la diferencia entre esas naciones y otras, como la nuestra, para atender un brote de esta magnitud, es pronosticable un desabasto de camas por insuficiencia de capacidad.
Con base en información de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), México, con 125 millones de habitantes, tenía 168 mil 828 camas de hospital en 2017, de las cuales sólo 2 mil 738 eran para cuidados intensivos en el sector público.
En contraste, Alemania tiene 28 mil; Reino Unido, 8 mil; Francia, 5 mil, y España, 4 mil 600.
En consecuencia, la necesidad de camas para atender a pacientes de esta enfermedad y otros padecimientos demanda urgencia y, si es necesaria la colaboración con el sector privado, debe hacerse a la brevedad.
“La cooperación resulta una medida benéfica, eficiente y congruente en una situación de crisis y la necesidad de que la economía se sostenga en el mediano plazo”, puntualizó Alcalá Padilla.
La parlamentaria jalisciense agregó que los acuerdos a los que se lleguen y la administración de los recursos deberán ser aprovechados por la Secretaría de Salud y sus homólogas en las diferentes entidades de la Federación para atender a la mayor cantidad de personas afectadas, evitar el colapso del sistema sanitario nacional y mitigar las consecuencias a futuro, que ya se prevén desproporcionados para naciones como la nuestra.
Solicitó el apoyo de la Cámara de Diputados a su llamado y para tal efecto presentó una propuesta de punto de acuerdo.